Había una vez, en ese pedacito de tierra en medio del mar
Caribe, donde ella puso su pasión para dejar atrás la ciudad hechicera; pero le
quedo pequeña, la ciudad hechicera la había hechizado, la había atajado, la
había amarrado y muy difícilmente ella podía olvidar donde había pasado sus
mejores años, donde había construido y armado sus sueños. En el presente, busca
las piezas del rompecabezas en esa isla perdida que ahora se encuentra, asoma
su cabeza poco a poco pero aún no las encuentra.
Maga