sábado, 30 de julio de 2011

Me conociste

Me conociste con mis problemas menstruales,
incluso con mis hormonas a mil.
Me conociste, con palabras profundas,
y frases inconclusas.
Me conociste el alma entera,
y con el cuerpo desnudo.
Me conociste en mis sueños,
en los tuyos.
Me conociste con mis ataques de nervios,
con mis dudas, mis contradicciones
Me conociste en presente, en mi pasado y en mi futuro,
Nunca dejaste de ver mi mirada triste
Me conociste antes de irme,
y aún sigues conociéndome.
Me conociste con mis sueños,
y aún me pillas.
Me conociste superficialmente,
y antes de irme, me conociste completa.
Me conociste sin prejuicios,
cuando parte de mi te impedía hacerlo
Me conociste sin maquillaje,
con el cabello al viento.
Me conociste en el verde mar,
en una guerra de algas, en un largo viaje.
Me conociste en esta vida,
en el pasado.
Me conociste en esencia,
hombre de 12 letras.
Y ahora me reconoces todo el tiempo.

Maga

martes, 26 de julio de 2011

Un tiempo

Un tiempo que corre,
y temes por tu cuerpo, que se haga viejo.
Un tiempo sin freno,
donde el rencor ha crecido.
Un tiempo de sobra,
que te ha hecho vengarte.
Un tiempo lento,
que no ha podido curar el mal recuerdo.
Un tiempo que pasa,
y tú sigues haciendo siempre lo mismo.
Un tiempo que se nos va de las manos,
porque no es tuyo, ni mío, ni de ella, ni de él.
Un tiempo que te ayuda a olvidarlo,
y por eso, ya no ves su sonrisa ni hueles su olor.
Un tiempo que te decepciono,
y te mato la ilusisión.
Un tiempo que no dio tiempo,
porque no permitio el perdón.
Un tiempo imperfecto,
porque nos falto tiempo.
Maga

Una calita invadida

Una calita invadida de aguas tranquilas, de suave mar, de peces que se esconden debajo de las rocas, de monstros marinos que susurran el despertar de su ira por la invasión del hombre. Aquel hombre que quiere poseerlo todo, para ir dejando huellas, para que sus manos vayan desplazando lo poco que queda de ella, de la naturaleza. El hombre siempre egoísta, buscando su beneficio sin darse cuenta de lo bello que tiene a su alrededor. Allí estamos invadiendo esa calita.

Maga

A los 29

Cuando tenía 2, mi memoria estaba apagada, desconocía mi existencia, solo tengo los recuerdos de las fotografías que reposan en la caja del armario de Maracay, donde miro y vuelvo a mirar, como en ese momento solo quería una piñata y una torta de Minnie Mouse.
A los 6, quería darle palo a la piñata, y recibir muchos regalos.
A los 10, me encantaban los cumples de piscinada. Luego llegaron los 14, ya no quería regalos de Barbie, ni piñatas ni tortas de Blanca Nieves, solo quería estar cerca al mar.
Un año después, me tocaron la puerta los 15, donde ni el vestido, ni los mariachis, ni la gran fiesta me animaban y muchos menos bailar el vals. Solo me conformaba estar cerca del mar.
Ya a los 17, me iba a la disco con una cedula de identidad falsa y a los 18 ya estaba cansada de ir.
A los 21, me fui con mis amigos a lo más alto de la montaña, entre música electrónica, ron y buenos amigos amanecí aquel 22 con mis 21.
A los 25, quería seguir estando cerca al mar. Y así pasaron los 4 años consecutivos.

A los 29, estaba buscando la soledad, solo yo con mis pensamientos, mis ideas y mi alma, pero siempre cerca del mar.

Maga

lunes, 18 de julio de 2011

Noche nublada

Copa de vino tinto a medio beber, humo de tabaco recién prendido, mano con uñas rojas, que toman el lápiz y el folio en blanco. En medio de la terraza, la mesa, en ella se posa, la copa, la botella, el lápiz, el folio, sus manos y el corazón de ella. Se escucha de fondo, el maullido de un gato, que se desliza sobre el tejado, un gato que huye de la soledad, para buscar compañía en aquella noche de niebla. Se une a ello, el oír de los coches pasar, que se encuentran a unos 14 pisos de distancia de la terraza, mientras la orquesta se va formando con el click de la agua del tocadiscos, donde el acetato de Ray Charles comienza a sonar. Ella allí, quieta, pausada, reposada no deja de escribir, mira hacia el cielo y se da cuenta que es una noche nublada, en su pequeño piso de la ciudad de Nueva York.
Maga

domingo, 17 de julio de 2011

La salsa

Fusión de sonidos que originan las palmas que le dan el song a los timbales, trompetas que se mueven de arriba hacia abajo,como una coreografía, un saxofón que como un guapo, deslumbran la mirada de muchos, dedos que se deslizan en el piano, batería que hace su trabajo, y una voz rápida que hace que la salsa suene con letras que le rinden tributo a nuestra raíces, un silbido que inicia el ritmo. Palmas que acompañan ese furor, mano que cruza la cintura de la hembra, la coge con fuerza, y ella se deja llevar, pasos que dialogan con emoción, vueltas sin parar, acercamiento poquito a poquito, respiración acelerada, erotismo sin freno, subidones con arrebatos, sensación de alegría, sonidos de esperanza y de igualdad. La salsa, que te despierta el alma y sin palabras te hace en silencio, comunicarte contigo mismo y con el otro.
Maga

CocoRosie - Good Friday

Me gusta el; pero sin él

Me gusta e; pero sin él. Frase que vuelve a mi mente, siendo confusa, abstracta, de interrogantes sin respuestas, sin rumbo, sin sentido. Encontrar a alguien que te guste sin él, es como no acercarte en lo más mínimo a una conexión verdadera. Me gusta el; pero sin él, sin su presencia, sin su apariencia, sin su rostro o corazón, es lo más aproximado, a que alguien te guste sin expresión, sin reacción.
Maga

En paralelo

Ventana con vista a la montaña. Ventana con vista a las terrazas de los edificios, y a lo lejos veo el mar. Sonidos que entra por tu puerta, de perezas que te despiertan. Sonidos que entra por mi puerta, de una gatita que maúlla. Cielos de nubes que lo dominan, cielo azul despajado, tú solo de verano todo el año y quizás un poco de lluvia, yo que no me canso de las 4 estaciones. Tú en búsqueda de alguien que te de un cariño en la espalda, yo en búsqueda de alguien que me reviva el sabor del beso. En paralelo, vamos construyendo vidas distintas, en un mismo tiempo pero fuera de espacio. Tú con tu coche, yo mis pies en el andar de un día a día. Yo de risa, tú de llanto o viceversa. Ambos, caminando en líneas de la vida en paralelo.
Maga

Ritmo

El ritmo es una palabra, que viene a mi mente y la puedo asociar con muchas cosas contestemente. Ritmo cardíaco, cuando nuestro corazón late. Ritmo de la música, ritmo de la vida, ritmo del trabajo, ritmo, ritmo, ritmo y más ritmo que nos marca un compás, un paso, algo visual o sonoro, que lo podemos percibir sin necesidad de tener los 5 sentidos activos. Ritmo que te acerca a alguien, en una danza salsera, un ritmo que te da erotismo, un ritmo que te agota, que te gusta, que te hace feliz, un ritmo aquí, un ritmo allá, poco o mucho, breve o extenso, un ritmo suave, rápido, un ritmo que te hace llegar a la cima. Un ritmo que puedes dejar de oír, mirar, sentir, vivir…y por supuesto un ritmo que te hace compartir. Para disfrutar de un ritmo, solo se necesitan dos.
Maga

domingo, 10 de julio de 2011

Revestimiento

Me pongo frente a tí, y te muestro mi fondo, que ya lo has tocado sin percatarte. Desnuda ante tí, te muestro mi forma, que la has palpado a tu manera. Te pongo en la mesa, mis tripas que aún están viva. Te llevo conmigo en mi presente como un bulto en mi espalda, donde el peso no me molesta del todo. Me enfrento ante tí, sin claramente saber, que es lo que viene. Me revisto frecuentemente con una malla de plástico transparente, donde me ves; pero al tocarme no sientes mi sudor que producen mis nervios constantes. Aún, siento un dolor en mis huesos, que son las consecuencias de este amor que ha dejado de ser incipiente. Revestimiento de capaz fugaces, que me quito cuando estoy frente a ti.

Maga

sábado, 9 de julio de 2011

Angustia incompleta

Se permite la risa, la duda, la espera, los llantos, la prisa, se permite el estar, el huir, el ir y venir, se permite sin paréntesis el seguir, el andar, el creer, el confiar, se permite una angustia incompleta que empieza; pero debe apagarse con extintores de papel, para que no logre avanzar.
Maga

A poco ella

A poco ella, que se rodea de mucha gente, que se divierte de pasar de un lado a otro, de un lugar que lo ve lejos; pero sigue cerca, de escuchar las distintas lenguas. A poco ella, que se mezcla con personajes dibujadas en ilustraciones de la infancia. A poco ella, que está una vez en la cuenta regresiva de días inciertos. A poco ella, que mira a los tres espadachines que la cortejan y aún no se asusta, lo disfruta, se ríe, sueña e imagina. A poco ella, que sus pies descalzos los deja dentro de la arena, mientras disfruta de la brisa nocturna.

Maga

martes, 5 de julio de 2011

Un doble de ti

Me he topado en las calles de Gaudí con un doble de ti. Un doble en mirada, que va desvistiéndome. Un doble en sonrisa, que me llega fuerte. Un doble de espalda, que lo veo y me confundo, porque me recuerda a ti, un doble quizás en olor y sabor porque igual que tú, tiene el mango en sus venas. Un doble, de tu mismo idioma y acento porque viene de allí, de ese lugar donde el mar tiene diversos colores azules. Un doble de voz, eso no lo sé, aún no la he escuchado, tu voz es aguda, varonil y difícil de repetir. Lo cierto es que este doble, que he conseguido se parece mucho a ti. Un doble esencia y de alma, que no se asemeja a la tuya, pero que al mirarlo me conecta, transciende, sin saberlo. Un doble de pasos suaves, silenciosos, de mirada fija y concentrada. Un doble que puede ayudarme a cerrar ese círculo, que aún ha quedado abierto.

Maga

domingo, 3 de julio de 2011

Ciudad Hechicera

Turistas que va y vienen, se detienen a fotografiar lo bello de la ciudad hechicera.
La luz que baña, las callejuelas que acobijan a los músicos, que con sus sonidos seducen a los viandantes que visitan la ciudad hechicera.
Pintores, poetas, filósofos, cineastas, escritores, arquitectos y músicos que levantaron a la ciudad hechicera, y que ahora suenan sus nombres en todo el mundo.
Lengua distinta, diferente, de pisada fuerte en la ciudad hechicera.
Ciudad de pasos transitorios, que atrapan los corazones de los viajeros, por su aire, su luz, su sol, su mar, su vida, sus calles, plazas y vías. Ciudad hechicera, que no para de recibir gente, gente de todo el mundo, que se desvive por la belleza de esa ciudad hechicera.
Maga

Si yo fuera ella

Si yo fuera ella, la soledad no me daría miedo.
Si yo fuera ella, le daría puñaladas al traidor.
Si yo fuera ella, me dejaría de engañar a mí misma.
Si yo fuera ella, me permitiría ser tonta.
Si yo fuera ella, no dudaría en marchar.
Si yo fuera ella, no seguiría enganchada al pasado.
Si yo fuera ella, me daría más espacio a mí.
Si yo fuera ella, no gritaría al mundo tantas palabras sin sentido.
Maga

Julio

Mes que dio vida, que me enseño a andar, a respirar, mes de muerte, dolor y vida a la vez. Mes de pocas letras, sonidos y noches, con mucho sol, de verano, mes donde descubres muchas cosas, mes de inicio, mes de pruebas. Mes donde la brisa se hace más seca y el sol te quema, mes donde arrancamos a volar, mes de principios, de respuesta recién formuladas, mes de decisiones, mes donde no dependo de mi misma, sino de otros, mes intranquilo, mes que da paso a un año más.
Maga

viernes, 1 de julio de 2011

Palabras de Santiago Gamboa, escritor colombiano.

Las mujeres de mi generación son las mejores. Y punto. Hoy tienen cuarenta y
pico, incluso cincuenta y pico, y son bellas, muy bellas, pero también serenas, comprensivas, sensatas, y sobre todo, endiabladamente seductoras, esto a pesar de sus incipientes patas de gallo o de esa afectuosa celulitis que capitanea sus muslos, pero que las hace tan humanas, tan reales.
Hermosamente reales.

Casi todas, hoy, están casadas o divorciadas, o divorciadas y vueltas a
casar, con la idea de no equivocarse en el segundo intento, que a veces es un modo de acercarse al tercero, y al cuarto intento. Qué importa...

Otras, aunque pocas, mantienen una pertinaz soltería y la protegen como
ciudad sitiada que, de cualquier modo, cada tanto abre sus puertas a algún
visitante.

Nacidas bajo la era de Acuario, con el influjo de la música de Los Beatles,
de Bob Dylan.... Herederas de la "revolución sexual" de la década de los 60 y de las corrientes feministas que, sin embargo recibieron pasadas por varios filtros, ellas supieron combinar libertad con coquetería, emancipación con pasión, reivindicación con seducción.

Jamás vieron en el hombre a un enemigo a pesar que le cantaron unas cuantas
verdades, pues comprendieron que emanciparse era algo más que poner al
hombre a trapear el baño o a cambiar el rollo de papel higiénico cuando éste, trágicamente, se acaba, y decidieron pactar para vivir en pareja.

Son maravillosas y tienen estilo, aún cuando nos hacen sufrir, cuando nos
engañan o nos dejan. Usaron faldas hindúes a los 18 años, se cubrieron con
suéter de lana y perdieron su parecido con María, la virgen, en una noche loca de viernes o sábado después de bailar.

Hablaron con pasión de política y quisieron cambiar el mundo. Aquí hay algunas razones de por qué una mujer de más de 45 nunca te va a despertar en la mitad de la noche para preguntarte.... "Qué estás pensando?" No le interesa lo que estás pensando.

Si una mujer de más de 45 no quiere mirar un partido de fútbol, ella no da vueltas alrededor tuyo. Se pone a hacer algo que ella quiere hacer y generalmente es algo mucho más interesante. Una mujer de más de 45, se conoce lo suficiente como para estar segura de sí misma, de lo que quiere, y de con quién lo quiere.

Son muy pocas las mujeres de más de 45 a las que les importa lo que tú pienses de lo que ella hace. Una mujer de más de 45, tiene cubierta su cuota de relaciones "importantes" y "compromisos". Lo último que quiere en su vida es otro amante posesivo.

Las mujeres de más de 45 son generalmente generosas en alabanzas. Ellas saben lo que es no ser apreciadas lo suficiente. Tienen suficiente seguridad
en sí mismas como para presentarte a sus amigas. Solo una mujer más joven e
inmadura puede llegar a ignorar a su mejor amiga.

Las mujeres se vuelven psíquicas a medida que pasa el tiempo. No necesitas confesar tus pecados, ellas siempre lo saben. Son honestas y directas. Te dicen directamente que eres un imbécil si es lo que sienten sobre ti.
Tenemos muchas cosas buenas que decir de las mujeres de más de 45 y por
múltiples razones.

Lamentablemente no es recíproco. Por cada impactante mujer de más de 45, inteligente, divertida y sexy hay un hombre con casi o más de 50... pelado, gordo, barrigón y con pantalones arrugados haciéndose el gracioso con una chica de 20 años y haciendo el completo ridículo.

Santiago Gamboa