MAGA VS. CARLOTA

Maga era una puta como pocas, a sus 60 años era el sol radiante de la Calle Meer. Todas las noches animaba las almas de los vecinos a través de su dulce y mágica voz en el interior del BAR DE LOS SUEÑOS. Su cuerpo y su libido no eran tan sexuales como en sus años mozos, pero a través de historias contadas en cada cita nocturna con sus amantes resaltaba la habilidad de ser una trabajadora sexual que ponía a volar a sus amantes nocturnos, amantes que se habían quedado con ella durante años, amantes que ya no la buscaban por morbo físico sino auditivo, amantes que la mantuvieron viva. Maga abandono las pericias que ejercía en la cama y las convirtió en dones que salían sin límites de su boca. Durante años, se dedico a sentir su profesión para ella, vendiendo su felicidad a muchos hombres que descubrían sus fantasías, debilidades y deseos, a través de ella. Huía y escapaba de la mirada universal de sus amantes, refugiándose en su propio disfrute silencioso. Beso muchos bocas como Maga, pero fue en ese pequeño rincón de la calle Meer bajo la luz del sol del verano cuando Maga a sus 60 años de edad experimento un beso letal. Su amante eterno Julio Fuentes había regresado para tomar su barbilla y mirándola fijamente a los ojos, le dijo: Hoy voy a besar a Carlota Ruiz, ella había recibido besos como Maga, pero se sintió dichosa de ser besada como Carlota. Ella a sus bien llevados 60 años y por primera vez entendió cómo era sentirse puta y feliz.

Gaby