Nunca te dije que mi gato escondido en el armario era el espía viviente de nuestros encuentros nocturnos.
Nunca te dije que mi cama se desarmo por otro amante.
Nunca te dije que las cenas eran improvisadas minutos antes de tu llegada.
Nunca te dije que siempre te seguía con mi mirada cuando pasabas.
Nunca te dije que escuche música que no me gustaba, pero que a ti te fascinaba.
Nunca te dije que nuestro amigo en común fue el cómplice de nuestro tropiezo en un tiempo imperfecto.
Nunca te dije que el baño que nos dimos en aquella ducha silenciosa fue el más largo de mi existencia.
Nunca te dije que me cuidaba para que mi corazón no se estropeara.
Nunca te dije que los msm eran para destinatarios distintos, pero llegaban a ti por equivoco adrede.
Nunca te dije que te agregue al Facebook para poder liarme contigo y que luego me elimine para no perturbarme más.
Nunca te dije que me cabreaba cuando no hacías caso a mis invitaciones.
Nunca te dije que el café dos veces al día no era mi costumbre diaria.
Nunca te dije que los kilómetros recorridos a la playa fueron inolvidables para mí.
Nunca te dije que la fosforera que nos tomamos fue la que mejor gusto tenía.
Nunca te dije que eras el duodécimo de mi lista.
Nunca te dije que durante 2 meses viví hipnotizada.
Nunca te dije que tu sabor a mango me acercaba a mi tierra amada.
Nunca te dije que te podía sustituir.
Nunca te dije que muchas de mis líneas transformadas en imágenes pertenecían a ti.
Nunca te dije que eras tú quien me mostro la dirección, sin salirme de mi camino.
Nunca te dije que podría regresar y que me esperaras.
Nunca te dije que después de muchos años fuiste el que conquisto mi corazón.
GABY
No hay comentarios:
Publicar un comentario